Aunque cada persona tiene un ritmo distinto y la pérdida auditiva no afecta igual a todos, en nuestro centro auditivo Belarria en Pamplona observamos patrones bastante claros sobre la edad a la que la mayoría empieza a revisar su audición. No se trata sólo de años, sino de síntomas, estilo de vida, exposición al ruido y cambios que se van acumulando con el tiempo.
En este artículo compartimos nuestra experiencia real, basada en decenas de estudios auditivos realizados durante 2024 y 2025.
Entre los 50 y los 60 años: los primeros cambios sutiles
Esta es, sin duda, la franja donde más personas empiezan a plantearse un estudio auditivo. No porque exista una pérdida brusca, sino porque aparecen señales pequeñas que ya llaman la atención.
Entre los 50 y 60 años solemos ver síntomas como:
- dificultad para entender conversaciones en ambientes con ruido
- pérdida de claridad al ver la televisión
- problemas para seguir conversaciones en grupo
- confusión entre palabras parecidas
- sensación de fatiga auditiva al final del día
Muchas personas llegan por iniciativa propia, aunque en la mayoría de los casos son familiares quienes notan primero los cambios:
“Te oigo decir muchas veces ‘¿qué?’ últimamente”.
“Te veo subiendo el volumen de la tele cada semana.”
Es una etapa clave para detectar pérdidas auditivas leves y evitar que progresen sin control.

De los 60 a los 70 años: la pérdida auditiva se vuelve más evidente
A partir de los 60, la presbiacusia —la pérdida auditiva asociada a la edad— empieza a ser más común. Es una causa natural, pero puede afectar mucho a la calidad de vida si no se controla.
En esta franja es habitual que la persona note por sí misma síntomas como:
- entender peor las voces agudas (mujeres y niños)
- dificultad para seguir conversaciones con varias personas
- necesidad de pedir que repitan con frecuencia
- sensación de “oír pero no entender”
En muchos casos, quienes vienen durante esta etapa suelen obtener un gran beneficio de la adaptación de audífonos, ya que la pérdida es moderada y la plasticidad auditiva sigue siendo buena.
A partir de los 70 años: revisiones periódicas y seguimiento
Entre los 70 y los 80 años la prioridad en consulta suele ser el seguimiento:
- revisar cambios en el audiograma
- recalibrar audífonos
- ajustar programas personalizados
- controlar posibles molestias, acúfenos o inestabilidad sonora
Es la etapa donde más importancia tiene mantener la audición activa y actualizada.
¿Y los jóvenes? Sí, también vienen
Aunque se asocia la pérdida auditiva a personas mayores, cada vez recibimos más consultas de personas entre 20 y 45 años. Las causas más frecuentes son:
- acúfenos por estrés
- exposición a ruido: ocio nocturno, cascos, conciertos
- tapones de cerumen
- infecciones recurrentes
- sensación de oído cansado
Esto demuestra que la edad ya no es el único factor determinante.
La edad importa… pero los síntomas importan mucho más
La recomendación general es realizar un estudio auditivo:
- a partir de los 50 años como prevención
- antes, si ya existen síntomas
- cada 1–2 años, en caso de pérdida auditiva diagnosticada
- anualmente, si usas audífonos
Un estudio auditivo completo dura menos de 30 minutos y permite detectar problemas antes de que afecten de verdad al día a día.
Pídenos uno aquí en Pamplona o Tafalla.

